Druzy

 
 

Cuando nos preguntan ¿qué son estas piedras? Siempre decimos “es un druzy” sin embargo no es la mejor manera de describirlo. Un druzy es simplemente un tipo de formación que se hace naturalmente en los cuarzos, ya sea de amatista, de ágata, de cornalina, de turmalina etc., aunque es importante comentarte que también es posible encontrar druzy en otras piedras como en la pirita.

Esta formación se compone de capas de cristales, que encontramos en las geodas fracturadas, esos pequeños micro cristales brillantes que se asemejan a granos de azúcar, son un druzy, drusa o drusies como también se les conoce.
En este tipo de cuarzos la calidad está determinada no sólo por el color, el peso y la claridad, sino también por el tamaño y la uniformidad de la cobertura de los cristales, esta característica es una de las más importantes para determinar el valor de la pieza.

Seguramente alguna vez te has encontrado con druzy en tonalidades metálicas, entre azul, amarillo y morado, este druzy esta bañado con una capa de titanio  que lo hace tornasol, este proceso se realiza sólo para hacer más atractiva la piedra.

La apariencia de estos cuarzos remite inmediatamente a una noche estrellada, es algo así como tener un pedacito de cielo contigo, sus múltiples cortes naturales hacen que el druzy refleje la
luz hacia todos lados. Pero además de su linda apariencia el druzy también tiene muchas propiedades  como armonizar y alinear las energías, el pensamiento y las emociones.

Como te podrás imaginar su principal uso es en la joyería, las diseñadoras lo usan como el elemento principal en muchas de sus creaciones, ya sean collares, pulseras o aretes, combinados con un sinfín de materiales que van desde seda hasta piel y piedras semipreciosas.